A.T.P.M

ASOCIACION TUCUMANA DE PESCA CON MOSCA

ATPM - Nuestros orígenes

La ATPM surge como un anhelo de hace muchos años que por factores diversos no pudo llevarse a cabo hasta ahora. Esta novel asociación que surgió en su estado larval tal vez como surgen las grandes ideas, las grandes decisiones o los grandes eventos, en una mesa de café.

Corría la primavera de 2008 y el azar hizo que los miembros de la futura Comisión Directiva se conocieran a través de un foro de pesca con mosca, se reunieran en un bar para tratar este tan extenso y apasionante mundo que es la pesca con mosca y allí, con la naturalidad de las cosas simples y de insoslayable grandeza, surgiese la idea de hacer una Asociación que nuclee a los pescadores con mosca en Tucumán.
Esta Asociación no solo buscará el perfeccionamiento del lanzamiento con una caña de mosca, sino también el atado, el conservacionismo, propendiendo a crear la conciencia de la necesidad de llevar una práctica deportiva menos agresiva con el medio como lo es la pesca y devolución, minimizando el daño hacia las distintas especies ictícolas, pensando en las generaciones futuras; no por el hecho de ser mosqueros, sino simplemente por ser seres pensantes que disfrutan con la pesca no con la muerte...
Queremos desde nuestra humilde posición crear la conciencia sobre la necesidad por parte de todos de respetar los intereses difusos, por cuidar el medio ambiente, por combatir la contaminación de nuestros cursos de agua y de todos y cada uno de nuestros recursos.
Deseamos junto con otras Asociaciones del país abocarnos a la protección y preservación no sólo de esa extraodinaria cuenca que es la Salí - Dulce, sino también de todo recurso hídrico tanto de la provincia como de la región, para nosotros, para nuestros hijos y para el disfrute de todos aquellos que, como nosotros lo hacemos hoy, quieran aventurarse en busca de tentar algún pez o tan solo de disfrutar de tan maravilloso espectáculo natural.

La tarea es hercúlea sin duda, pero si desde esta Asociación conseguimos formar no solo buenos casters, buenos atadores o buenos pescadores, sino también buenas personas, verdaderos caballeros con una caña de mosca en la mano, y lograr incorporar en la conciencia de todos los pescadores, más allá de la modalidad de su preferencia, la importancia de la protección de la fauna ictícola y de los ambientes tan maravillosos que nos regala nuestra generosa geografía, habremos cumplido gran parte de este cometido.


EDMUNDO FUENSALIDA
PRESIDENTE ATPM